Había oído hablar de Patones, pero nunca me había animado a acercarme a conocerlo. Esta vez, casi de casualidad, llegamos a este pueblo con el coche y decidimos parar a hacer una visita.

Patones es un pueblo de Madrid que se encuentra a 68 kilómetros del centro, es decir, a menos de una hora en coche. Es un sitio ideal para desconectar de la ciudad y disfrutar de un paseo agradable.

La parte más bonita se encuentra en Patones de Arriba, por lo que te recomiendo que vayas directamente. Cuando llegues a Patones de Abajo, te tienes que fijar porque hay un cartel que indica que hay que desviarse para llegar a nuestro destino.

Cuando llegamos, nos quedamos asombrados por la cantidad de coches que había aparcados fuera del pueblo, y es que parece ser que los fines de semana se llena. Había dos hombres encargados de organizar el aparcamiento, y nos indicaron amablemente hacia dónde teníamos que ir para conseguir un sitio, después de preguntarnos si habíamos reservado para comer en algún restaurante. Por eso dedujimos, que si tienes reserva, te dejan aparcar dentro. De todas formas, no había mucha distancia desde donde aparcamos.

Cuando entramos al pueblo nos encantó, las casas son muy bonitas y es uno de esos pueblos con encanto que tienen un montón de cuestas, pero oye, nunca viene mal hacer un poco de ejercicio. Aunque hay una Oficina de Turismo, nosotros preferimos pasear a nuestro aire y descubrir por nuestra cuenta la belleza de este pueblo. También se puede hacer alguna senda o ruta, de la que os pueden informar allí mismo.

Patones de Arriba tiene muchos bares y restaurantes, lo que no nos extrañó nada por la gran afluencia de turismo. Por lo que vimos, los menús rondan los 20 euros, pero nosotros no nos quedamos a comer allí. Eso sí, una cañita para recuperar fuerzas sí que cayó. Nos cobraron 5,70 euros por una caña y una jarra de cerveza, y un pincho de torrezno que venía incluido en el precio, en la Taberna Real.

La verdad es que nos encantó el pueblo, y no descarto ir a hacer alguna rutilla y comer en alguno de sus restaurantes.